Entrar en Iparralde por Ibañeta es todo un placer sobre la bicicleta. El problema, es que tras 20 Km de descenso hay que volver a pedalear.
El camino ahora es un continuo sube y baja. Al menos, el tiempo acompaña y disfrutamos de un cielo azul y un sol radiante inhabitual en esta zona y en estas fechas. Después de las últimas lluvias el campo está de un verde intenso salpicado de flores.
Así y después de tres jornadas de pedaleo cruzamos a Francia.
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1 comentario:
que paisaje mas precioso!!
pr favor, continuar colgandfo paisajes tan bonitos...
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